CONVOCATORIA
SEGUNDA CONFERENCIA DEL CONTINENTE AMERICANO DE LA UNIÓN INTERNACIONAL DE SINDICATOS DE PENSIONISTAS Y JUBILADOS (UIS), DE LA FEDERACIÓN SINDICAL MUNDIAL (FSM). LA HABANA- CUBA, 28 Y 29 DE ABRIL 2022
Estimados Camaradas:
La Unión Internacional de Sindicatos de Pensionistas y Jubilados(UIS), de la Federación Sindical Mundial (FSM) de conjunto con la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) y sus sindicatos, los invitan a participar en la Segunda Conferencia Regional “Unidad y Solidaridad, en Defensa de los Derechos de los Pensionistas y Jubilados”, a desarrollarse en los días 28 y 29 de abril en la hermana República de Cuba y posteriormente los delegados e invitados estaremos participando de las actividades previstas para la celebración del primero de mayo, por el Día Internacional de los trabajadores.
Desarrollaremos este importante evento en un contexto en que el gobierno de los Estados Unidos recrudece el Bloqueo económico, comercial y financiero y a desatado una feroz campaña mediática contra la Revolución Cubana.
Pese a todo Cuba reabre sus fronteras a los amigos del mundo, gracias al control y disminución de la Covid-19, es el primer país de América Latina y el Caribe y el segundo en el mundo en la inmunización antiCovid-19, con más del 90 por ciento de la población vacunada y el único que ha podido desarrollar una campaña masiva de vacunación en los niños mayores de dos años.
La Conferencia Continental tendrá como objetivo fundamental analizar la situación concreta de los pensionad@s, jubilad@s y de los adultos mayores en nuestro continente, para encausar nuestras acciones con miras a que se respeten nuestros derechos y que el sistema capitalista mundial no continúe afectando los años de vida que restan de nuestra existencia, como antesala del Tercer Congreso Mundial de la UIS P y J de la FSM.
Por la situación actual existente hemos evaluado desarrollar nuestra Conferencia con la modalidad semi presencial, con un total de 265 delegados e invitados, de ellos 45 de manera presencial y 150 de manera virtual, el resto serán delegados del país Sede. En esta oportunidad tendremos el honor de ser acompañados en este evento por el Presidente de la UIS P y J.
Cada organización podrá designar un delegado, de quien deberá enviar a más tardar el día 20 de abril, las informaciones siguientes: (identificando la categoría de delegado, invitado o acompañante).
• Nombres y Apellidos
• Número de pasaporte.
• Línea aérea en que viaja.
• Número del vuelo.
• Fecha y hora de arribo a La Habana
• Fecha y hora de su salida de La Habana de regreso a su país.
La entrada a nuestras instalaciones serán el 26 y 27 de abril y las salidas 3 y 4 de mayo, de permanecer fuera del tiempo convenido, deberán abonar al hotel los días excedidos según los precios establecidos por el mismo, próximamente se precisará la forma de pago y el costo total del evento por participante.
Agradecemos que con anticipación nos confirmen su asistencia y si tienen alguna duda o inquietud no la hagan saber, para resolverla antes de la fecha de nuestro evento, para realizar cualquier consulta se pueden auxiliar de los correos que se reflejan a continuación: JA Forero jantonio.forero@hotmail.com; y Marcos Wolman, Argentina marcoswol@hotmail.com
Cordialmente,
Dimos Koumporis, Presidente UIS P y J de la FSM; Quim Boix, Secretario General UIS Py J de la FSM; José Antonio Forero, Secretario de Organización; Marcos Wolman, Coordinador América; Xiomara Enríquez, Secretaria de la Salud; Milexsy Guizado Faez, Funcionaria de Relaciones Internacionales CTC Cuba.
CONFERENCIA REGIONAL DE AMERICA DE LA UIS PYJ FSM
La Habana, Cuba 28 y 29 de abril de 2022
Jubilaciones en tiempo de la crisis económica, social, política del sistema capitalista.
Los adelantos científicos y tecnológicos extienden la vida de las personas y la longevidad, motivo de satisfacción personal y social, que se constituye en una traba a la rentabilidad del capital, ya que acrecienta el destino del excedente económico para satisfacer la demanda de asistencia y atención a los adultos mayores.
El excedente económico, o plusvalía, es disputada por el capital para su acumulación ampliada, la reproducción y la dominación de éste sobre el colectivo social. A su vez, por distintos medios y formas históricas, el movimiento obrero con su resistencia y lucha arrancó concesiones al capital limitando la apropiación de plusvalor. Entre otras manifestaciones de esa lucha de clases se encuentra la reducción de la jornada laboral, las mejores condiciones de trabajo y de ingresos salariales, tanto como los derechos de asistencia sanitaria o la propia jubilación a determinada edad, que el sistema intenta postergar.
Las jubilaciones adecuadas a las necesidades sociales históricas son una reivindicación de la clase trabajadora en todo el mundo y solo pueden financiarse socialmente, producto de la apropiación de parte de la riqueza socialmente generada.
En la historia reciente del capitalismo, las jubilaciones fueron gestionadas desde los Estados nacionales y diversas formas de cooperativismo, mutualismo y formas organizativas de autogestión de los/as propios/as trabajadores/as.
Hace casi medio siglo, con la instalación de las políticas de ajuste y reestructuración, denominadas “neoliberales” existe un proceso continuo y deliberado de reversión de políticas sociales, las que definen al Estado Benefactor, desplegado entre la crisis del 30 y los 80 del siglo pasado. Este sistema de explotación, a la defensiva en contra de la extensión del socialismo desde la revolución en Rusia, optó por concesiones resignando plusvalía.
Esas conquistas sociales históricas están siendo consecuentemente desarmadas por el poder del capitalismo mundial, con el objetivo declarado de resolver la crisis de rentabilidad, la que se agrava desde hace medio siglo. Son variados los organismos internacionales que aluden a los problemas derivados de la caída de la tasa de ganancia tomado globalmente y, por ende, no sorprende que la política del imperialismo, acuda a la presión sobre los Estados nacionales y los organismos internacionales para imponer políticas de desmantelamiento del gasto social y bajar los presupuestos públicos que compiten en la apropiación de la plusvalía.
Es lo que se define como políticas de austeridad, comunes en los discursos públicos de las últimas décadas, los que contrastan con las políticas de asistencia a grandes empresas para evitar sus caídas. Resulta curioso verificar la cantidad de dinero, vía emisión monetaria o de deuda pública asignada al salvataje de empresas, mientras se restringen los recursos destinados a la población más vulnerable y a satisfacer los derechos conquistados por la clase obrera.
La lucha de clases entre el trabajo y el capital constituye la dinámica del desarrollo del sistema de explotación. La tendencia a la universalización del capital, exacerbada en tiempos de liberalización económica en el último medio siglo pone de manifiesto las nuevas formas de la disputa por el plusvalor. Por ello, la recurrente ofensiva por desarmar derechos sociales, individuales, colectivos, sindicales, previsionales. Es la historia que se recrea en nuestros días con el impulso a reaccionarias reformas laborales y previsionales, con la intención de recuperar cuota de plusvalía asignada a beneficios sociales, entre ellos, al régimen previsional.
La preocupación del capital es la pérdida de rentabilidad, asociada a una baja en la productividad del trabajo estimulada en las formas financieras de apropiación de la renta, generalizadas en el último medio siglo. La plusvalía se reparte entre los propietarios de medios de producción, como ganancia empresaria, comercial e industrial, pero también como renta del suelo o en dinero.
En los últimos tiempos hemos asistido a una expansión de los mecanismos financieros y derivados que suponen principal fuente de apropiación de la renta de los inversionistas. Lo visible de este sistema contemporáneo es la extensión de las formas dinerarias de manifestación de la riqueza. En ese sentido, el capital pretende dominar el destino de los fondos de pensión y por eso la búsqueda de su privatización, tanto en la gestión de los mismos, como en el uso de cuantiosos recursos para sus fines de reproducción y expansión del sistema.
La clase obrera constituyó su lucha y programa en la confrontación contra el régimen de explotación, demandando por sus reivindicaciones concretas, al tiempo que diseñaba una estrategia en contra y más allá de la dominación capitalista, por lo que desde el movimiento de jubilados y jubiladas apuntamos al conjunto del movimiento obrero para profundizar nuestra crítica y confrontación contra este orden establecido.
No se trata solo de promover los derechos de jubiladas y jubilados, sino de estructurar una estrategia del conjunto de la clase obrera mundial para frenar la ofensiva de la burguesía y reconstruir nuestra ofensiva, por nuestros derechos, en la búsqueda de una sociedad sin explotación que articule la mejora de la vida y el cuidado de la naturaleza para nosotros y las futuras generaciones.
En América, una tradición histórica previsional, en Argentina la primer Caja de jubilaciones fue en 1904 de trabajadores estatales, en Chile durante la dictadura de Pinochet la creación de las AFP, Administradoras de Fondos de Pensión, que sigue siendo la nefasta experiencia de la privatización de las jubilaciones. En la mayoría de los países del Continente el sistema previsional es mixto, público y privado.
La situación en Latinoamérica y el Caribe
La CEPAL destaca el impacto socioeconómico regresivo de la pandemia desde el 2020, que agrava las tendencias críticas del sistema mundial imperante, al respecto señala:
“Un elevado porcentaje de la población no está afiliado ni cotiza en los sistemas de pensiones y salud, un fenómeno que se asocia al alto nivel de informalidad laboral. Asimismo, las prestaciones de los programas continuos de protección social no contributiva tienen cobertura limitada y son insuficientes para asegurar el bienestar frente a la crisis.”
Agrega el informe citado:
- “…ya antes de la pandemia se evidenciaba una extendida realidad de desprotección en un conjunto amplio de trabajadores. Ello constituye una situación preocupante de cara a las transformaciones demográficas y en el mundo del trabajo, así como frente a los efectos del COVID-19.”
- El deterioro de estos años se evidencia en que:
“Pese a las persistentes desigualdades, entre 2002 y 2015, América Latina registró notorios aumentos en la cobertura de los ocupados que están afiliados o cotizan a los sistemas de pensiones (CEPAL, 2018b y 2019). No obstante, la información proveniente de registros administrativos muestra que en el período 2015-2017 se advertía un descenso en la cotización a los sistemas de pensiones”
- El informe abunda en información relativa al deterioro de la cobertura de seguridad social en el mercado de trabajo de los países de la región y una fuerte discriminación hacia jóvenes y mujeres, más allá de esfuerzos que se venían desarrollando en algunos países relativo a la ampliación de la cobertura en materia de pensiones y jubilaciones. Al respecto y sobre la cuestión de genero se destaca:
“En cuanto a la brecha de género en el acceso a pensiones, se observa que tanto en 2010 como en 2019 los hombres de 65 años y más tenían mayor cobertura que las mujeres.”
- Al considerar las medidas compensatorias asumidas ante la emergencia económica y sanitaria, el informe de la CEPAL advierte:
“Más allá de las medidas adoptadas, es necesario considerar los efectos de la crisis sobre los sistemas de pensiones en su conjunto, y en particular sobre la afiliación o cotización, a la luz de la evidencia preliminar de reducción de los cotizantes efectivos a los sistemas de pensiones por los efectos de la pandemia en el campo laboral. Todos los países para los que se dispone de información para el trimestre comprendido entre abril y junio de 2020 experimentaron reducciones interanuales en el número de cotizantes. Esta situación se vuelve particularmente crítica para las personas afiliadas a los esquemas de capitalización que están próximas a pensionarse (Arenas de Mesa, 2020).”
- Las citas de CEPAL dan cuenta del deterioro efectivo de las prestaciones sociales en materia de seguridad social y muy especialmente en el deterioro del sistema de jubilaciones, poniendo de manifiesto que el empobrecimiento de la población en la región latinoamericana y caribeña tiene especial impacto entre adultos mayores.
El régimen de pensión y jubilación está siendo deteriorado por las formas en que funciona el capitalismo contemporáneo.
Por eso resulta de importancia la organización de la lucha del movimiento obrero y especialmente de las organizaciones de jubiladas y jubilados en la defensa de sus reivindicaciones, siendo conscientes que constituyen el punto de partida para una disputa contra el programa de ofensiva capitalista. No hay solución a los problemas de jubiladas y jubilados en el marco de este sistema de explotación. La necesidad de nuestra estrategia parte por las reivindicaciones y se proyecta en una estrategia en contra del sistema de explotación y en favor del socialismo.
La relación dialéctica entre teoría y práctica. La práctica como criterio de verdad.
En este Congreso debemos impulsar las tareas que debatimos y aprobamos para llevar a la práctica los objetivos de la UIS PYJ de FSM. Acciones que se vieron afectadas por las consecuencias de la pandemia en la agudización de la crisis del sistema capitalista, y su manifestación en el deterioro de los regímenes sanitarios, y las exigencias en nuestra labor en cada país porque los más altos porcentajes de muertes y contagios son de personas mayores jubiladas y pensionadas, junto a la gravedad del deterioro de los haberes jubilatorios para la subsistencia.
A la vez la necesidad de un análisis criticó y autocrítico en la construcción de los espacios orgánicos necesarios para la coordinación continental, que aprobamos, considerando el desarrollo de las ideas colectivas sobre contenido y forma de la coordinación de nuestra UIS PYJ de FSM en América.
Fuimos desarrollando criterios de coordinación de la UIS PyJ de América, a partir del primer Congreso en Barcelona en el 2014, la primer Conferencia de América en Quito en 2015, en el 17 Congreso de la FSM en Sudáfrica en 2016, la reunión de dirigentes de América de nuestra UIS en San Pablo en 2017, la reunión de Coordinadores Regionales en Atenas en 2018, en el Segundo Congreso de la UIS PYJ en Bogotá, en 2019, en las reuniones de Coordinadores Regionales.
En este desarrollo de la UIS PyJ hemos concretado dos resoluciones fundamentales:
Constitución de Coordinadoras Subregionales en:
Méjico, América Central y el Caribe.
América del Sur.
América del Norte.
Las tres Coordinadoras subregionales con vínculos con organizaciones en 19 países de América, de ellos 14 países con dirigentes en la dirección de la UIS PyJ y 5 países incorporados en la Coordinación de Méjico, América Central y el Caribe, destacándose las diversas reuniones realizadas en esta subregión de América.
Objetivos de las Subregiones:
- Establecer contactos más estrechos, y solidaridad en las luchas, entre las organizaciones de los diversos países, vinculados por razones geográficas y políticas.
- Para acumulación política en espacios de unidad de acción reivindicativa, para crecimiento de nuestra UIS PyJ de FSM. con los contenidos clasistas, anticapitalistas, proyectos socialistas de la FSM, en nuestro ámbito de acción.
- Siete puntos básicos comunes de lucha, acordado para todos los países de América.
- Defensa de un sistema público, de reparto, asistido por el Estado, Intergeneracional, en los países donde están vigentes y la lucha por su establecimiento en países con sistemas privatizados total o parcialmente.
- Tres fuentes de financiamiento del sistema: los aportes de los salarios o ingresos de trabajador@s, aportes del Estado y los provenientes de las patronales.
- El aporte de los salarios o ingresos de trabajador@s son salarios diferidos, para obtener, cumpliendo los requisitos legales de cada país, un haber jubilatorio, sustituto del promedio actualizado de los mejores salarios, y su actualización de acuerdo a la movilidad de los salarios en el mismo cargo, oficio o función.
- El haber mínimo jubilatorio no debe ser inferior a la canasta básica de un adulto mayor.
- Los fondos jubilatorios deben ser dirigidos y administrados por representantes de trabajador@s activ@s, de jubilad@s y la participación del Estado.
- Un sistema de salud propio, que contemple, en esta etapa de la vida, las necesidades de prevención y atención de la salud, en unidades médicas hospitalarias, con servicios médicos, geriatras, y atención de especialistas con formación gerontológica, institutos geriátricos adecuados, centros de día, servicios sociales en atención domiciliaria por asistentes geriátricos y todos los requerimientos para una vida digna.
- Vivienda digna, con ayudas económicas y planes estatales de vivienda para situaciones de jubilad@s, pensionad@s y sus familias, en emergencia habitacional.