𝗗𝗘𝗕𝗘𝗠𝗢𝗦 𝗥𝗘𝗔𝗖𝗧𝗜𝗩𝗔𝗥 𝗟𝗔 𝗘𝗖𝗢𝗡𝗢𝗠𝗜́𝗔 𝗗𝗘 𝗟𝗢𝗦 𝗠𝗔́𝗦 𝗡𝗘𝗖𝗘𝗦𝗜𝗧𝗔𝗗𝗢𝗦
Por Luis Villanueva Carbajal / Secretario General FTCCP / Presidente CGTP
Fuente: Diario UNO / Lima, 27 enero 2024
Una buena forma de enfrentar la recesión económica que vive el país es reactivar la economía de los más necesitados, como los que ganan la remuneración mínima vital, los pensionistas y los desempleados, quienes sobreviven en momentos de crisis.
Por ello, la Central Nacional de Jubilados y Pensionistas del Perú (CENAJUPE) está evaluando una huelga de hambre en demanda del aumento de pensiones. Y la CGTP ha anunciado una jornada nacional de lucha para el 21 de febrero respaldando esta demanda y también el aumento del salario mínimo.
La demanda de los jubilados es clave. Existe desde 2023 un ofrecimiento de aumento del presidente del Consejo de Ministros, Alberto Otárola, y de la presidenta de la República, Dina Boluarte, quien inclusive señaló la cifra de cien soles para inicios de 2024, pero hasta la fecha no hay nada concreto.
Existe, además, una sentencia del Tribunal Constitucional que insta a aumentar las pensiones, pero no se ejecuta. Por ello, tales ofrecimientos del Ejecutivo parecen aprovechamientos políticos para intentar generar una aceptación popular que le es esquiva.
El aumento de la remuneración mínima vital y las pensiones generan mayor capacidad de gasto a la población más necesitada y reactiva las economías familiares en todos los rincones del país. Pero también es necesario generar puestos de trabajo para los desempleados, lo que puede hacerse rápidamente impulsando la inversión pública y privada, sobre todo en construcción civil, donde cada puesto laboral impacta en otros cuatro en actividades conexas.
Los trabajadores en construcción civil pertenecemos a un régimen especial, con una tabla salarial diferenciada, pero cuando no tenemos trabajo realizamos diversas labores, “cachuelos”, donde el piso salarial es la remuneración mínima vital. Esa misma situación viven cientos de miles de desempleados que necesitan la posibilidad de encontrar un trabajo y tener un piso salarial que por lo menos le sirva para solventar la canasta básica familiar. (fin)